Pieza 8
La musique de la nuit.
La musique de la vie.
Los grillons de tierras cálidas
y transpirantes se reúnen bajo estrellas brillantes para danzar el
rito divino que agradece la brisa de la montaña y la puesta de sol.
Los grillons llegan sonantes para hablarte en lenguajes, que
sólo si extiendes tus dedos en la noche podrás comprender. ¡No
cierres la ventana! Giros de voces, flexiones de tonalidades entre
instrumentos exóticos, calendarios en formas sinuosas que se
escriben de derecha a izquierda y no alrevés, te dicen con sabiduría
sempiterna: “no hagas como la chicharra que se puso a dormir sin
soñar y después despertó con un grito de ahogo sin agua.”
Así va saltando de gota en gota,
afinando sus botas de vocal en vocal, nuestro grillo fabuloso de
rincones más frescos hasta que... de repente, la orquesta de
grillons veraniegos llega como un trance elektro. Nuestro
grillo escucha esta música traida por estrellas fugaces y lo deja en
un trance de naturaleza rave. En un éxtasis de bigbang tiene
sonoras imágenes y sin cerrar sus ojos todavía grita como un
vendaval: “iré hasta tus tierras y cantaré con la fuerza de los
más antiguos santuarios!”