Nunca
seré famosa.
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En
la radio las noticias del suicidio del Justiciero. Se escucha una
grabación donde canta como Orfeo a Eurídice. La Couteau escucha
aburrida. Unos radio-aficionados conmemoran al Justiciero: 1 día de
no transmisión.
¿Pero
cómo? ¿Es que acaso dicen que el Justiciero se suicidó?...
¿Y
dónde queda mi reputación?
-escándalo
en la mirada-
¿Serán
capaces de decir que no fui YO quien le encestó esa cuchillada?
¿Ni
siquiera este inútil me servirá para lanzar mi nombre al
estrellato?
-mueca
de horror-
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¿De
qué sirve el amor no correspondido, si no es para dejar una huella
en el libro de las desventuras y dejar las palabras de consolación a
almas solitarias cuyo fin no es otro que el morir?
¿La
Couteau no tendrá justicia, incluso tras haber redimido al
Justiciero de ese sentimiento que lo consumía?
Los
radio-aficionados no conmemoran a La Couteau. Un día sin transmisión
es un día sin ovación.
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---------silencio.
“¿Nunca
seré famosa?”
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